Violencia | Colectivos de mujeres y disidencias oyeron políticas en marcha y reclamaron intervenciones
Integrantes de la Red Violeta y de Vivas nos queremos se reunieron con autoridades de Jesús María e intercambiaron opiniones sobre la situación crítica que se vive por la violencia.

El pasado 9 de marzo, por mesa de entradas de la Municipalidad de Jesús María, integrantes de las organizaciones La Colectiva y Vivas nos queremos, más vecinas autoconvocadas de Jesús María, Colonia Caroya, Villa del
Totoral, San José de la Dormida y Sierras Chicas hicieron entrega de una nota en la que pedían información sobre algunas cuestiones.
La situación límite que las motivó fue el femicidio de Melisa Moyano, a fines de enero, y la preocupación que les generó saber que había un acosador suelto en Colonia Caroya.
“Entendemos que la ciudad en la que vivimos tiene el índice de denuncia por violencia hacia las mujeres más alto de la provincia de Córdoba razón que, incluso, desborda al mismo Poder Judicial local”, señalaban en el escrito en el que, además, se permitieron hacer llegar algunas sugerencias de intervención.
Entre ellas, la creación de una red de trabajo, la articulación con los centros vecinales, la cooperación entre instituciones y colegios profesionales, y la realización de capacitaciones en perspectiva de género, además de la declaración de la emergencia municipal por violencia de género, y la creación de un “recursero” al que puedan acceder de manera fácil quienes transiten la ruta crítica de la violencia (teléfonos, procedimientos, lugares de asistencia, profesionales a cargo, entre otros).
Entre las informaciones solicitadas, preguntaron sobre estrategias, seguimientos, actividades, articulaciones, vías de comunicación, y espacios de atención.

La respuesta oficial
El municipio se tomó el tiempo necesario para responder a todos y cada uno de los planteos y decidió formalizar una reunión acotada con 20 mujeres, el pasado miércoles en el Nido de La Costanera.El intendente Luis Picat, la secretaria de Desarrollo Humano, Marianela Piazzano, y la responsable de la Unidad de Políticas de Género (UPG), Anahí Rodríguez, presidieron el encuentro.
Y se hizo una devolución leída del documento de 11 páginas con todas las intervenciones que realizó el municipio desde la puesta en marcha de la UPG en la ciudad.
Picat elogió que muchas de las políticas en marcha viniesen de gestiones anteriores y que su gestión haya decidido poner en el presupuesto $ 5 millones para el área. Acordaron avanzar hacia un enfoque regional de la problemática y darle periodicidad a las reuniones.

Las urgencias
Entre los planteos más urgentes, desde los colectivos hicieron hincapié en la necesidad de ofrecer asistencia a las víctimas de violencia, más allá del horario de atención municipal y, especialmente, durante los fines de semana.
“Una guardia se pide desde hace mucho tiempo, que se vea la forma en que se concrete sin poner como excusa el presupuesto. Creemos que algo mínimo es posible e indispensable, sobre todos los fines de semana o por la noche que es cuando recrudece la violencia”, señaló Yazmín Meza Gómez de Vivas nos queremos.
“También -añadió Meza Gómez- el tema del refugio para una mujer que queda en la calle frente a un caso de violencia de género, que se lo resguarde, que no tenga miedo de estar allí. Hay que buscar una respuesta efectiva y duradera en el tiempo”.